El Poder Ejecutivo nacional pretende a través del proyecto “Ley de Normalización de la Deuda Pública y acceso al crédito público” derogar la Ley Cerrojo y de Pago Soberano, para concretar el acuerdo con los bonistas que no entraron en los canjes 2005 y 2010 y que autoriza a emitir deuda para pagar a los inversores.
“No
resulta posible que un juez de Nueva York ordene al país que deba
derogar una ley para que se llegue a un acuerdo, ya que ello afecta la
soberanía popular y la división de poderes, principios fundamentales de
la República,, que consideramos aparte que la oferta realizada resulta
mala para el país debido a que se aceptaron todas las condiciones que
nos impusieron los Holdouts, ya que el país se encuentra en una
situación que no resulta precaria respecto de sus finanzas, y que
comprometen, sin lugar a dudas, a las generaciones futuras”, destaca el
escrito. Así agrega: “En el convencimiento de que el Partido
Justicialista, como oposición, y en defensa de los logros obtenidos en
el pasado y del futuro de los argentinos debemos oponernos orgánicamente
a la derogación de la Ley Cerrojo y de Pago Soberano”.
Resulta gravemente
perjudicial para la Argentina, puesto que el Gobierno abonará la
correspondiente deuda en efectivo, emitiendo bonos por un total de 15
mil millones de dólares, siendo este el endeudamiento más grande de los
últimos 20 años de un país en desarrollo”.
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